martes, 1 de octubre de 2013

Trabajo de Investigacion

INTRODUCCIÓN


 Desde muchos años atrás, el hombre ha tenido la necesidad de tener una distracción fuera de la realidad. Muchas de estas distracciones fueron derivadas del género dramático, donde encontrábamos las representaciones del ser humano las cuales eran tragedias, comedias y posteriormente la mezcla de las ya nombradas que generó el drama.

 En esta ocasión nos centraremos en las tragedias, ésta tiene sus orígenes en la antigua Grecia, con grandes autores como lo fueron Sófocles, Euípides y Esquilo, entre otros, autores de grandes obras tales como Edipo Rey, Ifigenia en Áulide y Medea. Estas tragedias tienen el fin de generar “catarsis”, donde el lector siente empatía por el protagonista.

A lo largo de la historia la tragedia ha evolucionado. Esto lo podemos evidenciar en algunas de las obras célebres de William Shakespeare, tales como: Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth.

En el siguiente trabajo trataremos de evidenciar   las alteraciones o modificaciones que ha experimentado la tragedia, destacando características generales de las obras ya mencionadas anteriormente, generando un contraste entre las tragedias de ambos periodos.

 En este informe trataremos la siguiente pregunta ¿Cuáles son las diferencias entre las tragedias griegas e isabelinas, tomando como referencia las tragedias de William Shakespeare?

Nuestro principal objetivo, es identificar las diferencias existentes entre las tragedias griegas y las obras Romeo y Julieta, Macbeth y Hamlet.
Por otra parte, buscamos establecer una conexión entre tragedias griegas y las obras ya mencionadas de William Shakespeare.


DESARROLLO

Como todo debe evolucionar a través del tiempo, la derivación del género dramático llamado tragedia, no se ha quedado atrás. 

Las tragedias griegas, son una representación dramática capaz de conmover y a la vez, poseía un desenlace fatal. Se caracteriza por:
-  Las obras eran escritas en versos y estructuradas en escenas, en las cuales participaban los personajes y con intervenciones del coro en forma de canciones
  La historia de la tragedia se basa en mitos o en antiguos relatos. Por lo que es común la existencia de seres divinos entre sus personajes. 
 
La tragedia griega, toma lugar con un plano diferente al del culto y al de los mitos. Transformó los cultos y los mitos en función de cumplir sus objetivos, los que son: el cuestionamiento de la conducta humana  y la responsabilidad del actuar del hombre.
Entre los autores más destacados encontramos a Esquilo, quien habría compuesto veinte tetralogías de las que se conservan: los persas, los siete contra Tebas, las suplicantes, Prometeo, entre otras. También nos encontramos con Eurípides,  quien poseía su propia biblioteca una de las más completas de toda Grecia. Sus obras más destacadas son: los persas y los suplicantes.

“Pero la felicidad es inconstante, y cuando la aflicción viene después de la dicha, la vida es intolerable al hombre” 

El género de la tragedia  a lo largo de la historia ha evolucionado. Muchos años más tarde de la         creación de la tragedia griega, surge la tragedia Isabelina, la cual cuenta con destacadas obras como lo son Hamlet, Romeo y Julieta y Macbeth.

La tragedia isabelina surge en la época del reinado de  Isabel I de Inglaterra (reina desde 1558 hasta 1603). La tragedia isabelina tiene una gran importancia en lo que es su argumento, ya que, la acción de la tragedia isabelina está enfocada en el conflicto que se desarrolla en la tragedia. En muchas de estas tragedias, podíamos apreciar la existencia de bandos, los cuales eran las fuerzas en pugna de la tragedia, como en el caso de Romeo y Julieta. También buscaba que el lector y/o espectador sintiera empatía con el protagonista de la tragedia, lo cual también se pueda apreciar en las tragedias griegas. 
El mayor exponente de la tragedia isabelina fue William Shakespeare. Fue un dramaturgo, poeta y actor inglés, n el siglo XX, sus obras fueron adaptadas y redescubiertas en multitud de ocasiones por todo tipo de movimientos artísticos, intelectuales y de arte dramático. Las comedias y tragedias shakespearianas han sido traducidas a las principales lenguas, y constantemente son objeto de estudios y se representan en diversos contextos culturales y políticos de todo el mundo. Varias obras son consideradas clásicas de la literatura universal. 

“La tragedia excelente y alta, abre heridas más grandes y muestra úlceras apenas recubiertas por un fino papel; la tragedia hace que reyes teman ser tiranos y que los tiranos teman mostrar sus humores tiránicos” 

Como ya hemos mencionado, las características tanto de las tragedias griegas y las tragedias isabelinas, realizaremos un contraste entre tragedias griegas y las siguientes obras de William Shakespeare: Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth. 



Las tragedias de Shakespeare suelen  describir a un protagonista que cae desde el páramo de la gracia y termina muriendo, junto a una ajustada proporción del resto del cuerpo protagónico. En ellas el amor es un arma para el sufrimiento, la venganza y la traición como partes fundamentales de las vidas de los atormentados personajes y la muerte como destino de gran parte del reparto de la mayoría de sus tragedias. 

Las tragedias griegas presentan conflictos exteriores al héroe. En cambio, en las tragedias de William Shakespeare el protagonista sufre un conflicto interior. Esto lo vemos en Macbeth, donde el protagonista comete todos sus errores gracias a su actitud llena de ambición.

En las tragedias griegas, sus héroes siguen un fin individual, el cual opaca al héroe. En las tragedias de William Shakespeare, el protagonista comete errores por conflictos humanos reales, como: ambición, amor, etc. Esto lo evidenciamos en la de William Shakespeare, Romeo y Julieta, la cual una historia de amor imposible, que lleva a los protagonistas a un destino fatal.

En las tragedias griegas, la justicia o castigo que recibe el protagonista es de origen divino. En las tragedias de William Shakespeare, la muerte viene como solución a los conflictos humanos. Esto se ve reflejado en la de William Shakespeare, Hamlet, cuando el joven protagonista recibe la muerte luego de haber innumerables traiciones y conflictos.

Hemos evidenciado que las tragedias griegas y las tragedias de William Shakespeare poseen grandes diferencias, pero ambas buscan generar un sentimiento de empatía con del lector hacia el protagonista de la obra. Es necesario destacar, la importancia de estas obras en la literatura universal. Las tragedias además de la catarsis buscaban mostrar el cruel desenlace cuando un sentimiento negativo se apoderaba del personaje con esto tratando de que la gente evitara hacerlos como la ambición en Macbeth, el odio entre las dos familias en Romeo y Julieta y por último la venganza en Hamlet.

CONCLUSIÓN 

 
Nuestro principal objetivo con este trabajo, era dejar en claro las diferencias existentes entre las tragedias griegas y algunas obras de William Shakespeare. Aunque el tema a tratar no era algo simple, se trató de desarrollar ampliamente a través de esta investigación. Recopilando información desde distintos sitios web y libros e introduciéndonos en las mismas obras de William Shakespeare.

 A lo largo que íbamos avanzando en el desarrollo del trabajo, nos pudimos dar cuenta de las diferencias significativas que existían entre las tragedias. Como por ejemplo temas tan importantes como el conflicto de la obra o las características de los protagonistas son esenciales a la hora de apreciar un contraste entre las tragedias griegas y las obras de William Shakespeare.

 Nuestro objetivo era hacer un contraste entre las tragedias, pero a la vez que fuera fácil de entender para los lectores de nuestro trabajo. Creemos que esto se pudo lograr y que a la vez logramos nuestro objetivo más importante, que dejar claro la diferencia entre las tragedias griegas y las tragedias de William Shakespeare. También habíamos planteado un objetivo menor, el cual era establecer una conexión entre las tragedias pensamos que cumplimos en este aspecto.

 Para concluir mostramos que las tragedias de Shakespeare son la evolución a través del tiempo de las tragedias de la Antigua Grecia.








domingo, 29 de septiembre de 2013

Resumen Romeo y Julieta

Los Montecchi (Montagues) y los Cappelletti (Capulets), las dos principales familias de Verona, son enemigas. Romeo, hijo del viejo Montecchi, asiste enmascarado a una fiesta en casa de los Capuletos y, si antes se creía enamorado de Rosalina, ahora descubre que su verdadera pasión es Julieta. Después de la fiesta, los jóvenes se encuentran inflamados en mutuo amor. Y, estando bajo la ventana de Julieta, Romeo la oye confesar a la noche su amor por él, y obtiene su consentimiento para un matrimonio secreto.

Con la ayuda de fray Lorenzo se casan al día siguiente. Mercutio, amigo de Romeo, encuentra a Tebaldo, biznieto de la señora Capuleto, furioso por haber descubierto la presencia de Romeo en la fiesta; Mercurio y Tebaldo riñen. Romeo interviene, y al desafío de Tebaldo responde con palabras que ocultan el nuevo vínculo de parentesco, y rehúsa batirse. Mercutio se indigna ante tanta sumisión y saca la espada. Romeo trata en vano de separar a los contendientes, consiguiendo tan sólo dar ocasión a Tebaldo para herir de muerte a Mercutio. Entonces Romeo se ve arrastrado a luchar y mata a Tebaldo.

Es condenado al destierro y, al día siguiente, después de haber pasado la noche con Julieta, deja Verona para ir a Mantua, siendo exhortado por fray Lorenzo, que entiende que aquél es el momento oportuno para hacer público su matrimonio. Julieta, forzada por su padre a casarse con el conde Paris y aconsejada a hacerlo incluso por su nodriza, que antes había favorecido su unión con Romeo, se deja convencer por fray Lorenzo de que consienta, pero bebiendo la víspera de la boda un narcótico que la hará parecer muerta durante cuarenta horas. El fraile mismo se ocupará de avisar a Romeo, que la sacará del sepulcro a su despertar y la conducirá a Mantua.

 Julieta pone en práctica el consejo. Pero el mensaje no llega a Romeo porque el fraile que debía entregarlo es detenido como sospechoso de contagio; en cambio le llega la noticia de la muerte de Julieta. Compra a un boticario un poderoso veneno y se dirige hacia el sepulcro para ver a su amada por última vez; en la entrada encuentra a Paris y lo mata en duelo. Entonces, Romeo, después de haber besado a Julieta por última vez, bebe el veneno. Julieta vuelve en sí y encuentra a Romeo muerto, con la copa aún en la mano. Se da cuenta de lo sucedido y se apuñala. Este trágico fin es narrado por el fraile (que llegó demasiado tarde para impedirlo) y por el paje del conde Paris. Los jefes de las dos familias enemigas, conmovidos por la catástrofe provocada por su enemistad, se reconcilian.


Resumen Macbeth

Macbeth y Banco (Banquo) son generales de Duncan, rey de Escocia. Volviendo de una victoriosa campaña contra los rebeldes, encuentran en una llanura a tres brujas que profetizan que Macbeth será "thane" (título nobiliario escocés semejante a "barón", con que se indica a los compañeros del rey) de Cawdor y luego rey, y que Banco engendrará reyes, aunque él no esté destinado a serlo. 

Inmediatamente después llega la noticia de que Macbeth ha sido nombrado barón de Cawdor.
Tentado por el cumplimiento parcial de la profecía y por lady Macbeth, que excita en él la ambición, secando "la leche de la humana benevolencia", Macbeth asesina a Duncan, hospedado en su castillo, mientras duerme, pero en seguida es presa del remordimiento. Los hijos de Duncan, Malcolm y Donalbain, huyen, y Macbeth se apodera de la corona. Pero todavía queda un obstáculo en el camino de Macbeth: las brujas habían profetizado que el reino iría a parar a la dinastía de Banco, por lo cual Macbeth decide hacer desaparecer a éste y a su hijo Fleance, pero éste logra huir.


Perseguido por el espectro de Banco, que se le aparece durante un banquete, Macbeth consulta a las brujas, que le dicen que se guarde de Macduff, barón de Fife; que nadie nacido de mujer podrá hacer daño a Macbeth; y que sólo será vencido cuando el bosque de Brinam vaya hasta Dusinane. 

Sabiendo que Macduff se ha unido a Malcolm, quien está reclutando un ejército en Inglaterra, Macbeth hace asesinar a lady Macduff y a sus hijos. Lady Macbeth, a quien le había caído de la mano el puñal al intentar, antes que su marido, asesinar a Duncan, y ver en él por un momento a su propio padre, pierde la razón e intenta en vano hacer desaparecer de sus manos la visión de la sangre; finalmente muere.

El ejército de Macduff y de Malcolm ataca el castillo de Macbeth: pasando por el bosque de Birnam cada soldado corta una rama y detrás de esta cortina de follaje avanzan contra Dusinane. Macduff, sacado del vientre materno antes de tiempo, da muerte a Macbeth. La profecía se ha cumplido y Malcolm sube al trono.


Resumen Hamlet.

En la tragedia de Shakespeare, el rey de Dinamarca ha sido asesinado por su hermano Claudio, que ha usurpado el trono y se ha casado, sin respetar las costumbres, con la viuda del muerto, Gertrudis. El espectro del padre aparece a Hamlet en la muralla del castillo de Elsinore, refiere las circunstancias del delito y pide venganza. Hamlet promete obedecer, pero su naturaleza melancólica le hace irresoluto y le obliga a diferir la acción; mientras tanto se finge loco para evitar la sospecha de que amenace la vida del rey. Se cree que ha turbado su mente el amor de Ofelia, hija del chambelán Polonio, a la que, habiéndola cortejado anteriormente, trata ahora con crueldad.


Hamlet comprueba el relato del espectro, haciendo representar ante el rey un drama (el asesinato de Gonzago), que reproduce las circunstancias del delito, y el rey no sabe dominar su agitación. En una escena en que clama contra su madre, Hamlet supone que el rey está escuchando detrás de una cortina y saca la espada, pero mata en cambio a Polonio. El rey, decidido a hacer desaparecer a Hamlet, le envía a Inglaterra con Rosencrantz y Guildenstern, pero los piratas capturan a Hamlet y lo devuelven a Dinamarca.
A su llegada encuentra que Ofelia, loca de dolor, se ha ahogado. El hermano de la muchacha, Laertes, ha vuelto para vengar la muerte de su padre Polonio. El rey, aparentemente, quiere apaciguarlos e induce a Hamlet y a Laertes a rivalizar, no en un duelo, sino en una partida de armas que selle el perdón; pero a Laertes le dan una espada con punta y envenenada. Hamlet es traspasado, pero antes de morir hiere mortalmente a Laertes y mata al rey, mientras Gertrudis bebe la copa envenenada destinada al hijo. El drama concluye con la llegada del puro Fortinbrás, príncipe de Noruega, que se convierte en soberano del reino.


Biografía William Shakespeare.

Dramaturgo y poeta inglés. Tercero de los ocho hijos de John Shakespeare, un acaudalado comerciante y político local, y Mary Arden, cuya familia había sufrido persecuciones religiosas derivadas de su confesión católica, poco o nada se sabe de la niñez y adolescencia de William Shakespeare.

 La andadura de Shakespeare como dramaturgo empezó tras su traslado a Londres, donde rápidamente adquirió fama y popularidad en su trabajo para la compañía Chaberlain’s Men, más tarde conocida como King’s Men, propietaria de dos teatros, The Globe y Blackfriars. También representó, con éxito, en la corte. Sus inicios fueron, sin embargo, humildes, y según las fuentes trabajó en los más variados oficios, si bien parece razonable suponer que estuvo desde el principio relacionado con el teatro, puesto que antes de consagrarse como autor se le conocía ya como actor.


A partir de 1600, Shakespeare publica las grandes tragedias y las llamadas «comedias oscuras». Los grandes temas son tratados en las obras de este período con los acentos más ambiciosos, y sin embargo lo trágico surge siempre del detalle realista o del penetrante tratamiento psicológico del personaje, que induce al espectador a identificarse con él: así, Hamlet refleja la incapacidad de actuar ante el dilema moral entre venganza y perdón; Otelo, la crueldad gratuita de los celos; y Macbeth, la cruel tentación del poder. 

En sus últimas obras, a partir de 1608, cambia de registro y entra en el género de la tragicomedia, a menudo con un final feliz en el que se entrevé la posibilidad de la reconciliación, como sucede en Pericles. Shakespeare publicó en vida tan sólo 16 de las obras que se le atribuyen; por ello, algunas de ellas posiblemente se hubieran perdido de no publicarse (pocos años después de la muerte del poeta) el Folio, volumen recopilatorio que serviría de base para todas las ediciones posteriores.